El betacaroteno se encuentra en ciertos alimentos y se descompone para convertirse en vitamina A en el cuerpo. El examen se puede llevar a cabo para medir la cantidad de éste en la sangre.
Ver también examen de vitamina A.
Examen de caroteno
Se necesita una muestra de sangre. Para obtener información sobre la forma como se hace esto, ver el artículo: venopunción .
No coma ni beba nada por un período de seis horas antes del examen. Es posible igualmente que el médico le solicite dejar de tomar medicamentos, como el retinol, que pueden interferir con los resultados del examen.
Cuando se inserta la aguja para extraer la sangre, algunas personas sienten un dolor moderado, mientras que otras sólo sienten un pinchazo o sensación de picadura. Posteriormente, puede haber algo de sensación pulsátil.
El médico puede ordenar este examen si usted tiene signos de que su nivel de vitamina A puede estar demasiado bajo, tales como:
El examen también se puede utilizar para ayudar a medir la forma como el cuerpo absorbe las grasas.
El rango normal es 50 a 300 microgramos por decilitro.
Los ejemplos de arriba son mediciones comunes para los resultados de estos exámenes. Los rangos de los valores normales pueden variar ligeramente entre diferentes laboratorios. Algunos laboratorios utilizan diferentes mediciones o analizan muestras diferentes. Hable con el médico acerca del significado de los resultados específicos de su examen.
El incremento en los niveles puede deberse al hecho de tomar demasiada vitamina A. Ver: hipervitaminosis A.
Los niveles por debajo de lo normal pueden ocurrir cuando:
Aunque este examen es una parte valiosa del diagnóstico de la deficiencia de vitamina A, los resultados deben ser analizados junto con otros datos clínicos.
Las venas y las arterias varían en tamaño de un paciente a otro y de un lado del cuerpo a otro, razón por la cual extraer sangre de algunas personas puede ser más difícil que de otras.
Otros riesgos asociados con la extracción de sangre son leves, pero pueden ser:
Fischbach FT, ed. Manual of Laboratory & Diagnostic Tests. 7th ed. Philadelphia, Pa: Lippincott Williams & Wilkins; 2004.
Lewis JH. Liver disease caused by anesthetics, toxins, and herbal preparations. In: Feldman M, Friedman LS, Brandt LJ, eds. Sleisenger & Fordtran’s Gastrointestinal and Liver Disease. 9th ed. Philadelphia, Pa: Saunders Elsevier; 2010:chap 87.